martes, 6 de diciembre de 2011

Feliz Navidad 2011



SI LE HACES CASO,
ESTE NIÑO NO TE DEJARÁ
DORMIR  TRANQUILO.


Este niño te va a complicar la vida:
ayudar a los pobres, compartir,
amar desinteresadamente…
Hazle caso y verás todo lo que recibes a cambio.

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Mi comunidad ha querido provocar, con esta imagen y este texto, una llamada de atención, porque cuando llega la Navidad solemos quedarnos sólo con lo bonito, colores, luces, bebé recién nacido, Jesús viene a nosotros… Pero no es eso lo más importante, no es eso a lo que vino el Hijo de Dios a la tierra, no debemos olvidar (nosotros que lo sabemos de antemano), que el primogénito del Padre vino a morir por nosotros, y eso nos deja con una gran deuda, una deuda que no se puede devolver de cualquier manera, sino de la forma concreta que Él nos dijo: «Amaos los unos a los otros como yo os he amado» (Jn 13, 34), Dios ya no nos dice «Amarás a tu prójimo como a ti mismo» (Lv 19, 18b), Jesús viene a actualizar la ley de Dios, a exigirnos más, pues ya no somos niños, ya no necesitamos especificar (y quedarnos) en 10 mandamientos, con Jesús todos quedan vinculados y reforzados en el mandamiento del Amor, pues si amas a tu hermano como Él lo hizo, no lo matarás (en ningún sentido), ni le robarás, ni codiciarás lo suyo…
En este tiempo, más que nunca, es cuando más tenemos que poner en práctica lo que Jesús nos enseñó, en este tiempo de crisis (no sólo económica), en esta época del año en la que miles de personas están solos en sus casas, o lo que es peor, en la calle, que no tienen suficiente con el frío de la soledad, sino que tienen que soportar el frío invierno. Ahora es el momento de los cristianos, que se nos note, no se trata de que salgamos a las calles y recojamos a los desfavorecidos y los llevemos a casa (que no estaría mal), sino que seamos conscientes que no son pobres, sino empobrecidos, a causa de nuestro consumismo, no dejemos que los grandes almacenes sigan apoderándose de lo que no es suyo, dad «Al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios» (Mt 22, 21).
Intentad gastar lo menos posible, si de verdad os creéis que “lo importante es estar toda la familia unida”, no malgastéis el dinero ni el tiempo en comida y regalos, preparad una comida con mucho cariño y si acaso comprad algún detallito barato (a todos nos gustan los regalos) en una tienda pequeña (el pequeño comerciante necesita ayuda) y local (tenemos que levantar nuestro país).
Que paséis una MUY Feliz Navidad, que acojáis a Nuestro Señor con la responsabilidad que se merece, y que el año que entra esté cargado de felicidad, fuerza de voluntad y, si Dios quiere, de puertas para salir de la crisis.
Un abrazo enorme,
Israel Jesús Ortega Gómez

2 comentarios:

Pepe y Lola dijo...

Gracias Isra, feliz (en todos los sentidos) Navidad

Panflín dijo...

Feliz Navidad,
felices ventas para los que sufren más la crisis,
felices compras para quienes compartan lo sencillo,
felicidad para las familias y personas de buena voluntad.

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